Un libro que analiza dos años de pandemia. Una obra clara y perspicaz que explica por qué la gestión de la crisis sanitaria ha sido un fracaso.

Dos años después del inicio de la pandemia, ya no hay duda alguna sobre el fracaso en la gestión de la covid-19: se implementaron medidas ineficaces, perjudiciales, autoritarias y sin respaldo científico, basadas más en intereses políticos que en la salud pública. Estas medidas se utilizaron con maniobras represivas y mediáticas que generaron sumisión e infantilización en la población, desarticulando la sociedad, dividiendo y polarizando, fomentando el individualismo y la obediencia ciega. El mundo sale de estos dos años con graves secuelas, cicatrices que difícilmente desaparecerán.

Es necesario acabar con el discurso de un virus amenazante que nos acecha en cualquier lugar, listo para arrebatar la vida de miles de personas de todas las edades y condiciones: esa no es la realidad, ni lo ha sido nunca. Esa percepción aterradora, producto de la propaganda, es el principal combustible que ha alimentado la pandemia. Es fundamental poner fin a esta sensación apocalíptica completamente injustificada.

En ningún momento se ha realizado una evaluación de las medidas adoptadas: ni su impacto en la reducción de contagios y muertes por covid, ni sus consecuencias en relación a otras enfermedades, la vida social, la salud psicológica, la educación, el empleo o la economía. La razón de esta falta de evaluación oficial es evidente: se trata de un balance vergonzoso.

Los gobiernos intentarán pasar página: olvidar los errores o presentarlos como deficiencias inevitables en el contexto de la urgencia. Incluso habrá quienes intenten presentarlos como aciertos. En este libro, queremos realizar un balance abierto de los acontecimientos que marcaron la vida de la sociedad humana durante dos años y que dejarán una profunda huella en el futuro.

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