En este libro, el autor expone una realidad física respaldada por pruebas contundentes que demuestran la importancia que diversas ramas científicas han tomado al intentar ocultar dichas pruebas. Sin embargo, su única motivación es proteger manifestaciones y relatos escritos que, en su momento, parecían ser ciertos pero que, a la luz de nuevas evidencias, ya no son aceptables.

A pesar de esto, el autor argumenta que disciplinas como la arqueología, la paleontología y la egiptología no tienen el derecho de estancar sus aportes y considerarlos como ciencias exactas e inmutables. Según él, es necesario actualizar las cosas basadas en pruebas evidentes, algo a lo que hasta ahora se han opuesto simplemente porque lo consideran imposible.

VER PRECIO EN AMAZON