La belleza del arte es necesaria para ser feliz. En la vida cotidiana, el arte le otorga a la vida esa dimensión adicional que la convierte en una gran aventura. El arte y el diseño en edificios, urbanismo, jardines y parques, calles, puentes; todo lo que usamos a diario contribuye a una vida feliz y plena. Los edificios feos, el diseño descuidado, la mala calidad de la construcción, los desechos y la degradación contribuyen a una vida miserable. ¿Por qué querrías una vida miserable? ¿Por qué querrías imponer una vida miserable a los demás?

Hokusai no solo fue un gran artista, sino que también envió un mensaje a las personas comunes que podían permitirse comprar sus impresiones económicas. Transmitió la belleza majestuosa del monte Fuji en la vida. Transmitió la belleza del paisaje, les dijo a las personas: mira a tu alrededor y observa y disfruta la belleza del paisaje. Transmitió la belleza de una buena vida humana: la artesanía en la construcción de madera, en la construcción de barcos, en la pesca, en el cultivo de té y en disfrutar del té con el paisaje.

Las 36 vistas del monte Fuji son impresiones religiosas. Pero a diferencia de los motivos religiosos típicamente cristianos, las personas no están enfocadas todo el tiempo en la piedad, aunque se muestra que el monte Fuji tiene una influencia penetrante en sus vidas. La admiración y veneración del monte Fuji se muestra a menudo de manera casual: un viajero solitario del grupo echa un vistazo a la majestuosa montaña mientras los demás están ocupados con las muchas otras cosas que deben hacer. En otras palabras, una representación muy realista de cómo lo divino participa en la vida cotidiana.

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